Dr. Rock: cinco momentos musicales memorables en “House”.
La semana pasada se estrenó en Estados Unidos la séptima temporada de Dr. House (o House M.D. como se llama en inglés). Tengo entendido, también, que por estos lares se viene en las próximas semanas vía la señal de Universal. He escrito más de una vez en revistas sobre la serie, sus personajes, sus guiones, sus altibajos. Pero creo que nunca he tenido oportunidad de incidir en uno de los aspectos que más me gustan de mi programa favorito: la música.
Desde el tema de apertura, esa exquisita pieza de Massive Attack llamada Teardrop (que, valga la aclaración, solo se usa en algunos países), hasta las canciones que escogen para cerrar cada episodio, el aspecto musical siempre ha estado muy bien cuidado por los productores de la serie. Ahora, si consideramos que Hugh Laurie además de actor también es músico, ahí ya tenemos un super plus para la serie. Porque de todas las secuencias musicales que ha tenido el show en seis temporadas, las que más he disfrutado son aquellas en las que el mismo House aparece tocando algún instrumento, cantando o sencillamente haciendo fonomímica. Así que, sin ánimos de competir con mi pata Daniel Goya y su blog sobre series de televisión, me tomé el trabajo de hurgar en Internet y recopilar cinco de mis momentos musicales preferidos en House.
Georgia on my mind – Temporada 5
Laurie es pianista. Y uno muy bueno, por cierto. Por tal razón, a veces a pedido del director o los guionistas y otras por sugerencia del mismo actor, hemos visto al Dr. House sentado frente al piano en distintas ocasiones. Una de las que más recuerdo es esta secuencia final del capítulo Saviors, en la que toca este arreglo instrumental de esta pieza originalmente compuesta por Hoagy Carmichael a principios del siglo pasado y cuya versión más famosa es la de Ray Charles.
Midnight Train to Georgia – Temporada 6
Y hablando de Georgia, esta es otra escena épica. House, Foreman y Chase se roban el show en un karaoke interpretando este clásico de Gladys Knight & The Pips. Jesse Spencer y Omar Epps, Chase y Foreman, respectivamente, al igual que Laurie también tienen sus inclinaciones musicales; el primero toca el violín y canta y el otro tiene también un pasado como artista de hip-hop.
Baba O Riley/Slippery when wet – Temporadas 1 y 3.
House es, además de drogadicto, misántropo y canalla, un gran melómano. Tanto, de hecho, que más de una vez se le ha visto absorto en alguna canción que escucha a todo volumen. El recurso está harto visto en el cine y la tele gringa, pero igual sigue funcionando: House tocando el piano y la guitarra de aire en dos clips, el primero con el clásico de The Who del disco Who´s Next y el segundo con un pegajosísimo tema funky de The Commodores. De más está decir que me siento totalmente identificado con ambos momentos: siempre viene alguien que te baja de la nube.
Juro que veía venir esta. House y Wilson están viviendo juntos y el primero reta al otro a que decore la casa él mismo, sin ayuda mediante, que compre muebles y adornos que digan algo sobre él. Finalmente, como agradecimiento por la desahuevina de su amigo, el buen WIlson le regala un órgano que, creo, es un Hammond B3. Si son fanáticos del sonido de este teclado, entonces entenderán que una de las primeras canciones que se te vienen a la mente cuando piensas en uno es A Whiter Shade of Pale de Procol Harum, acaso una de las mejores canciones de los últimos cincuenta años. Dicho y hecho.
NOTA
Sorry, traté y traté de encontrar un clip que me permitiera incrustarlo en este blog, pero ha sido imposible, de modo que es mejor que lo vean directamente enHouse también toca guitarra. Lo gracioso de esta escena, me parece, es haber escogido un tema de George Michael (ícono gay, para mayores señas) para que House despierte a su roommate Wilson. De repente lo hicieron para burlarse de las especulaciones de ciertos fans que los tasaban de gays.
Antes de hacerse famoso en Estados Unidos por la serie de marras y, en menor medida, por películas como Stuart Little, Laurie forjó una sólida carrera como actor y comediante en Inglaterra, de la mano de su compinche Stephen Fry. “A bit of Fry and Laurie” era un programa de humor en el que ambos actores escribían sus propios sketches. Muchos de ellos incluían también música compuesta por el mismo Laurie. De todas esas, All we gotta do es quizás mi favorita, una parodia/tributo a las canciones de protesta sesenteras.
Esta versión está subtitulada en castellano, para que no digan que este es un blog poco democrático y alienado.