El actor estadounidense Tony Curtis falleció a los 85 años, informó este jueves su hija la actriz Jamie Lee Curtis a la página web Entertainment Tonight.
Intérprete habitual de numerosas comedias de Hollywood de las décadas de los 50 y los 60, como “Some like it hot” (1959), Curtis fue hospitalizado en julio pasado en Las Vegas (EEUU) a causa de problemas respiratorios, aunque aún se desconocen los detalles sobre su muerte.
Con más de cincuenta años de carrera y un centenar de películas como protagonista, Curtis, cuyo verdadero nombre era Bernard Schwartz, nació el 3 de junio de 1925, en Nueva York, en una familia de origen judío.
Estudió interpretación en la Academia de Arte Dramático de su ciudad natal y en 1949 debutó en Hollywood con un papel de secundario en “Criss Cross”.
Su popularidad en el cine comenzó dos años más tarde con “The Prince Who Was a Thief””, y protagonizó después títulos como “Six Bridges to Cross”, “Trapecio”, “The Defiant Ones” y “Spartacus”.
Una de sus más famosas interpretaciones sería “Some like it hot”, en la que Billy Wilder reunió a tres figuras del cine, Marilyn Monroe, Tony Curtis y Jack Lemon.
Curtis se casó en seis ocasiones, la primera de ellas en 1951 con la actriz Janet Leigh, madre de sus hijas Jamie Lee y Kelly Curtis, también actrices.
En la actualidad estaba casado con la modelo Jill Vandenberg, 45 años menor que él.
Tony Curtis se despidió de la interpretación en 2005 con una colaboración en la serie televisiva “CSI” y en los últimos años de su vida cultivó una de sus grandes aficiones, la pintura.
En 2008 expuso una colección de 35 cuadros en los grandes almacenes londinenses de Harrods.
El actor siempre mostró su amor por el cine. “El cine me sigue gustando, porque es mi vida. Estoy hecho de celuloide”, afirmó al recibir hace diez años un premio a su carrera en el Festival Internacional de Sitges (noreste de España).