Las muchas horas de ensayos a las que se somete Belén Estévez para lograr cada semana acrobáticos pasos de baile y unas presentaciones casi perfectas, le están pasando la factura a la argentina, quien confesó se encuentra exhausta y con el cuerpo adolorido a puertas de la final de “El gran show”.
“La competencia está difícil, mi cuerpo y mi mente ya no dan más, pero no voy a dejarme vencer jamás. Me he sacado la mugre todas las galas para llegar adonde estoy, así que seguiré adelante”.
Pese a sus dolencias, la argentina que se encuentra sentenciada junto a Miguel Rebosio, no baja la guardia y ya se prepara para recorrer cuanto programa le abra las puertas para pedir que la apoyen con el número 15.
“La gente quiere verme bailar así que iré a programas como Magaly, a centros comerciales, a donde sea con tal que apoyen. Por primera vez estoy dejando de ensayar para hacer campaña y es que el sobrino de mi soñador Gian Frak de cuatro añitos necesita un tratamiento costoso.
Es urgente porque sufre encefalitis viral y tiene convulsiones y problemas serios. Se necesita plata y yo no puedo ayudarlo económicamente porque tampoco tengo, así que pido a todos me apoyen para cumplir este sueño”.
Desde que se inició el reality de Gisela Valcárcel, Belén dejó de lado su carrera actoral y el disco que estaba grabando, sin embargo no se arrepiente de nada.
“Tuve propuestas, pero mi prioridad es el sueño que también es el de mi soñador y el mío. Ambos quisimos estar aquí y ahora que termina sí analizaré algunos proyectos que tengo en televisión”.
Fuente: Diario Ojo