Luego de que allegados a la ex esposa del notario señalaran que la relación entre Alfredo Zambrano y Magaly Medina es un simple bluf publicitario, ella misma aclaró que no es así y que no tiene nada que esconder, pese a que su vida privada la mantine alejada de la opinión pública.
Sin embargo la periodista eligió la noche del último viernes, en el avant premiere del reestreno de ‘El Barbero de Sevilla’, para presentar a su novio en sociedad.
Alfredo Zambrano, conocido entre sus amigos como Pingüino, no esperaba las preguntas de la prensa: “¿Ha venido a la ópera por amor?”, a lo que el hombre de leyes respondió: “Sí, he venido por amor”, para de inmediato ocupar un palco y disfrutar de la puesta en escena de Juan Diego Flórez, mientras la Bocona muy amorosa lo guiaba diciéndole: “Ven por acá mi amor”.
Gentita nice se incomodó. Dentro del renovado Teatro Municipal mucha gente amante de la lírica puso mala cara y hasta reclamó ante la presencia de la prensa, sobre todo por la cantidad de flashes y empujones para sacar la mejor toma de la pelirroja y su abogado.
En el intermedio de la obra, Magaly y su pareja salieron de la sala y al encontrarse con los periodistas se mostró feliz y encantada. La Urraca mostró su blanca dentadura, se sentía como en una alfombra roja de Hollywood, y amablemente dijo: “A él no le gustan las fotos… estoy buscando el baño, permiso”.
Grita su amor a los cuatro vientos. “No tenemos nada que esconder, pero yo de cosas particulares y personales prefiero no hablar, esas son cosas para mí. ¿Que mi relación es por publicidad? No, por favor, yo no necesito hacer esas cosas, menos con mi vida personal”, sostuvo la Bocona, que no soltaba de la mano a su novio Alfredo Zambrano, con quien se reconcilió hace una semana. Encantada con Juan Diego. “Para mí ha sido un honor estar en este avant premiere de un tremendo tenor como es Juan Diego Flórez. No tenía tiempo para acudir a verlo antes, pero se dio la oportunidad. Estoy orgullosa de ser peruana cuando tienes a un talento como él triunfando así por todo el mundo”, comentó la Urraca.
La llevó en su BMW. Afuera del teatro la seguridad de la Medina se juntó con los guardaespaldas del notario. A la salida le trajeron el auto negro del letrado hasta la misma puerta, la Urraca como toda una novia se subió al lujoso vehículo, que más atrás fue escoltado por una 4×4 Mercedes ploma en la que iban sus resguardos.
Fuente: Diario Aja
