El actor confesó su extravagancia, aduciendo que cuando encontró a su mascota comiendo las setas, no pudo evitar compartirlas.
Las extravagancias de las estrellas de Hollywood son únicas, pero esta quizá es la más extraña de todas. Nicolas Cage confesó tener una cercanía con su gato que supera la relación tradicional amo-mascota.
El actor contó que una vez se drogó no junto, sino con el animal, de nombre Lewis. “Tenía una bolsa llena de setas en mi nevera”, recordó la estrella de la pantalla grande. “Mi gato solía colarse en la nevera y comerlas a escondidas. El gato devoraba las setas, así que pensé: “¡qué demonios!, mejor me las como con él’”, agregó.
Cage aseguró, entre risas, que en medio del episodio pensó que Lewis era su hermano. “Recuerdo estar tirado sobre la cama durante horas mirándonos y no tuve ninguna duda de que era mi hermano”, comentó.
El actor aseguró que esos hábitos son cosa del pasado y que lleva mucho tiempo sin probar drogas.