Brooklin, de 11 años y Cruz, de 5, demostraron que les encanta lucirse ante cámaras desobedeciendo a su madre, la ex Spice Girl.
Cada vez que le preguntan a Victoria Beckham sobre si quiere o no tener otro hijo más, la ex Spice Girl siempre responde que no, argumentando que “con tres, es más que suficiente”.
Ahora -más que nunca- entendemos su respuesta y le damos toda la razón.
Anoche, la diva británica demostró tener serios problemas para controlar a sus pequeñuelos después de una cena en un restaurante japonés.
Las imágenes muestran que Victoria lucha por el control de Cruz -de 5 años- muy entusiasta y sonriente ante las cámaras.
Naturalmente, a Cruz le encanta llamar la atención. Pero Victoria, con evidente rostro de disgusto, hizo retroceder a su retoño acomodándolo junto a ella y poniéndole el cinturón de seguridad.
Mientras esto ocurría, Brooklin, el mayor de 11 años, aprovechó el descontrol de su madre para seguir haciendo monadas frente al expectante público.