¿Bandera blanca a la vista? La bronca entre Shirley Arica y Aída Martínez es de larga data, desde que se disolvió el grupo Las Justicieras con acusaciones de deudas económicas pendientes. Pero todo eso, quizás, podría estar por llegar a su fin.
Aunque no estuvieron cara a cara, como la última vez, la ‘Chica Realidad’ y su examiga volvieron a coincidir en ‘Amor, Amor, Amor’ en un enlace vía microondas pero, en vez de lanzarse ataques como otras veces, se trataron de forma jovial mutuamente.
Incluso, como Aída contó que deseaba tatuarse un corazón, Shirley le recomendó a una persona para que le haga el trabajo. Y al final, a pedido de los conductores del referido programa de espectáculos, se animaron a dar unos pasos de baile.
¿Será que piensan dejar las peleas en el pasado? En su último encuentro, la expareja de Reimond Manco se distanció varios metros de su examiga y, cuando esta le pidió llevar la fiesta en paz de ahora en adelante, derramó lágrimas.
El pleito entre las dos se exacerbó cuando Aída asistió en ‘El Valor de la Verdad’ y contó, entre otras cosas, que Shirley la agredió en Cusco y que cuando convivieron metía a gente extraña, en su mayoría hombres, en su departamento.
La expareja de Julián Legaspi, además, confesó que es bisexual, algo que la ‘Chica Realidad’ había insinuado antes. Pero esta última estaría ya dejando todo en el pasado, como hizo con Gianina Luján. Esta última, pues, había sido ampayada con una expareja de Shirley, Martín Fuentes Boggiano.
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Fuente: Diario Trome