Voy a confesar: Kina es una mujer especial. Debo revelar algo: Es una buena chica. Partiendo de estos dos conceptos, empiezo a contarle que cada entrevista con ella es una aventura que sorprende, que emociona. No anda con la frase hecha para quedar bien, tampoco rebuscará una palabrita complicada, ni melosa, para explicar algo.
Es tal cual, pero siempre es diferente. Hoy la siento más mujer, tierna, alegre y feliz. Temas que no quiso ni quiere esquivar. Vayamos al interior de su ser, al mundo de la ‘Dinamita’, donde a la señorita Malpartida muy pocas veces le gusta recibir.
Te veo más sexy…
Ahora expreso más mi lado femenino. De chibola siempre me he sentido recontramujer, pero si todo el tiempo haces deporte de hombre como el boxeo, se generan hormonas masculinas.
Por eso se te notaba tosca.
Todas las chicas agarramos músculos. Mis compañeras de ‘Esto es guerra’ están fuertes y es por los constantes ejercicios.
Pero ya conversamos varios años y estás cambiada.
Reconozco que estoy más fachosa. Me hago la pedicura, todo. Me maquillo diariamente.
Creo que en cualquier momento nos sorprendes con un galán.
Estoy haciendo casting ja, ja. Tengo algunos selectos que ya están en el ranking de los diez finalistas.
¿Los eliges por Facebook?
No soy hincha de esa red social, soy fanática. Ha sido un buen medio para ir conociendo a los ‘pretendientes’.
Imagino que alguno tiene más ventaja que otro.
Todavía no he hecho ¡clic!, pero estamos avanzado.
¿Descartados los tramposos?
Creo que todas las personas tienen sus épocas de travesuras. También pienso que los infieles, si se enamoran, pueden cambiar.
Cuidado con lo que dices, te puede aparecer un ‘lobo’ disfrazado de ‘cordero’.
Si te metes con alguien que fue un ‘jugador’ de toda la vida, ya sabes a qué atenerte. Tampoco pidas peras al olmo. Son los riesgos.
¿Cómo se le reconoce al infiel?
O es muy hablador o es muy callado.
¿Y a las ‘canallas’?
Esas son más estratégicas que el mismo infiel. Caminan con cuidado y no sueltan el anzuelo por soltarlo. Analizan muy bien qué paso van a dar y son muy atentas. Esto lo sé, pero cuidado, no pienses que lo soy, ah, ja, ja.
Con esa descripción, las mujeres van a parar sus antenas.
Y que recuerden que esas chicas juegan en todas las canchas, están en todos lados.
¿Es recomendable que primero haya amistad con la futura pareja?
Sí, luego que surja el amor. Los seres humanos cuando se muestran como amigos, son realmente como son y no aparentan otra cosa.
Todo está bien, pero debo preguntarte: ¿qué ofreces tú?, ¿sabes cocinar?
Hago un lomito saltado que lo dejo chupándose los dedos. Previamente le sirvo una entrada de papa a la huancaína o un plato de ocopa. Me sale recontrabuenazo.
O sea, ahora conquistas por el estómago.
Claro, también exijo que sepa entrarle a la cocina. No voy a ser la única que sorprenda, pues.
¿Y si no tiene buena sazón?
Que tenga harta plata para que contrate una buena cocinera, ja, ja.
Ya veo que no estarías con un ‘misio’.
No, pues, ya no estamos para eso. Que sea bien chamba. Ya pasé tantas cosas, angustias. No voy a pasarme la vida mendigando.
Ese punto es interesante. Pocos saben lo que te tocó vivir.
Trabajé limpiando waters, lavando carros, de cajera. No te confundas, hijito, vengo de abajo.
Entonces que se quiten la idea de Kina, la que nació en cuna de oro.
Tengo cara de ‘pituca’, nada más. Después, todo lo mío ha sido con trabajo.
Volvamos a tu próxima pareja, ¿debe bailar bien?
No me importa eso, pero sí que no tenga vergüenza hacerlo, así lo haga mal.
¿Le harías masajitos?
La pedicura. Todo depende de cuánto me enamore.
Si te molestas, ¿le metes un puñete?
No, no, ja, ja. Si me saben tratar, soy un bombón.
¿Bombón asesino?
No. Solo un bombón de chocolate.
¿Me parece o quieres una relación formal?
Todo se va a ir dando, pero sí me gustaría tener varios hijos, pero bueno, eso dependerá de la economía también.
¿Cómo serás de mamá?
Muy buena madre y cuidaré mucho mi familia. He vivido muchos años sola y sé lo importante que es llegar a casa y encontrarte con los tuyos. Ese calor no tiene precio.
Nunca me has contado si alguna vez golpeaste a un ‘faltoso’.
En Australia, en una discoteca, me metieron la mano y le metí un cachetadón. Allí terminó todo. Después, no me gusta la violencia para nada.
Otro cambio es tu tranquilidad, lo pausada que ahora eres.
No salgo. Soy muy casera, tengo todo ordenado, limpio y veo películas. Esas cosas las disfruto y mucho.
¿Ahorrativa?
Casi nunca voy a comprar, solo trato de abastecerme de lo que me gusta y me va a servir.
¿Serás empresaria?
Sí. Saldrán a la venta mis chocolates ‘Kinazo’. Yo misma voy a dejarlos en los mercados. La gente me ve y le digo que son deliciosos, ricos y lo aceptan. El pueblo siempre me dio afecto y por eso estoy muy agradecida.
Llegamos en el momento justo y exacto. Cuando exportes tus golosinas, te buscaremos para la siguiente entrevista.
Ya, pues. Hay que avanzar, hermano. Tú no eres el mismo desde que me hiciste la entrevista pasada, yo tampoco. Vamos mejorando día a día. Lo reconozco. Chequeo las entrevistas el domingo y los demás días no compro Trome, porque siempre hay uno en el canal y allí me lo devoro.
Me obligas a que te defina como una chica Trome.
Ustedes lo son para sacar un diario como el que publican. Gracias, porque siempre están atentos a mis logros.
Este nuevo encuentro con la campeona mundial me lleva a recoger esa bendita frase de Walter Riso, psicólogo y escritor nacido en Italia, criado en Argentina: “Necesitamos un mundo de mujeres más fuertes y de hombres más tiernos”.
Fuente: Diario Trome