La conductora de “América espectáculos” fue modelo en su juventud y dice que en ese tiempo estaba bien despachada. Señaló que después de dar a luz empezó a adelgazar.
Fiorella Rodríguez es un personaje y durante su carrera se podría decir que ha hecho de todo. Fue modelo, conductora de “Punto de quiebre”, estudió música y, tras unos años dedicada a su labor como madre, volvió a la conducción de su viejo programa “América espectáculos”. Por si fuera poco, la “flaca” es empresaria y también socia de Más Medios, una empresa que hace difusión de prensa.
Fiorella comentó que no siempre tuvo esa figura delgada. “Antes era carnosita, peruanaza. Di a luz y me chupé. Mi hija tiene 12 años. Hace diez u once años que tengo esta figura y, desde entonces, me preguntan si soy anoréxica o bulímica y no lo soy, al contrario”, dijo la conductora en entrevista a “Perú.21”.
“Antes pesaba 54, 55, 56; hoy 49. Después de tener a mi hija me puse implantes para “mantener las formas’ (risas). Pero mi cuerpo los rechazó; ni siquiera me podía vestir, no me podía caer ni una gota de agua. No sabe lo que sufrí. “Qué salada soy”, le dije. Además, no soy la única mujer delgada en este país”, contó.
Luego añadió que, a pesar del tiempo que estuvo fuera de las pantallas, no se siente desfasada. “Sigo siendo la misma y trato de divertirme. Cuando la cámara se apaga me vacilo igual. Si me ve disforzada, soy disforzada; si me ve exagerada, lo soy un poco. Hablo mucho con las manos”, comentó
Fuente: El Comercio.pe