El control a la actriz se realizó el 13 de junio, mientras estaba confinada en su casa de Venice Beach, California.
Tiene arresto domiciliario, pero al parecer la situación no la hizo escarmentar. Lindsay Lohan no pasó una prueba de alcoholemia ordenada por la corte hace algunos días y tendrá que ir ante un juez por una flagrante violación de libertad condicional.
La prueba a Lohan se llevó a cabo el pasado 13 de junio, mientras la actriz está confinada en su casa de Venice Beach, California, a causa de una sentencia de cárcel impuesta el mes pasado, dijeron fuentes cercanas al caso en declaraciones que reproduce la web de la cadena CNN.
La actriz se presentará ante el juez Stephanie Sautner del Tribunal Superior del Condado de Los Ángeles, este jueves a las 10 am, el mismo juez que la sentenció a 120 días en la cárcel después de que ella se declaró culpable de robar un collar, dijo un portavoz de la fiscalía este miércoles.
ESTABA CONTENTA CON ARRESTO
La actriz, que (hasta el momento) está condenada a 120 días de arresto domiciliario por violar sus condiciones de libertad condicional, aseguró -hasta antes de conocerse la nueva violación de la libertad condicional- que estar recluida en su casa de más de 900 metros cuadrados en Venice Beach California tiene sus beneficios, según informó hoy la revista “Life & Style”.
La joven estadounidense, de 24 años, aseguró que ha tenido tiempo de ponerse al día con películas y shows de televisión y que el encierro le permite estar fuera del ojo público, pero lo más importante es que ha tenido tiempo para decorar su casa.
“Probablemente no lo hubiera hecho si no hubiera estado en casa”, aseguró la protagonista de “Mean Girls” en la última edición de la publicación que saldrá a la venta el próximo viernes.
Fuente: El Comercio