En la conferencia de prensa que brindó el último miércoles para confirmar que la pequeña Constanza no era su hija, a Pablo Villanueva ‘Melcochita’ se le vio con el rostro desencajado y bastante triste, pero horas después se transformó y se divirtió de lo lindo hasta el amanecer con su amiga cariñosa Kínder.
El morenaje dejó las penas atrás para bailar y beber junto a la bailarina en un local barranquino. Incluso el cómico aprovechó la ocasión para darle un anillo a Kínder en señal del enorme cariño que siente por ella.
“He salido con Kínder porque es una mujer que aprecio. Es una chica linda y no descarto volver con ella ya que no puedo estar solo”, expresó muy sonriente quien ya tenía más de una copa encima.
Cabe precisar que hace algunos meses, Melcochita y Kínder tuvieron un romance cuando el cómico estaba separado de Monserrat Seminario, pero el amor duró pocos días.
“Monserrat no me interesa”
Sin embargo, para Melcochita es inevitable hablar de Monserrat, y aseguró que no siente lástima de que esté pasando por un severo cuadro de depresión.
“Ella ya no me interesa, no es mi problema lo que está viviendo. Está enterrada para mí, ya pasé la página, ahora me abocaré a mis trámites porque la próxima semana viajo de gira a Alemania”, sostuvo.
Pese al resultado de la prueba de ADN, Melcochita no olvida a Constanza y por eso ayer le envió, con su hija Susan, ropa y regalos a Piura.