Conoce de qué trata esta nueva película nacional, singular comedia que se estrenará el 27 de octubre.
Al frente tiene los 80 mil dólares. Alejandrino Falopio (Guillermo Castañeda) ve una oportunidad, y la toma. Él es un guachimán, el tipo al que nadie le presta importancia. Sabe que con esos 80 mil dólares va a poder dejar encantada a Laurita (Stephanie Orúe), su novia. Sabe que con ese dinero, él tiene el poder.
“El guachimán”, ópera prima de Gastón Vizcarra que se estrena el 27 de octubre, es una apuesta por hacer comedia en el Perú, y basa su gracia en el personaje de Alejandrino (Álex), que trabaja en una empresa de seguridad, y que tiene la oportunidad de robar 80 mil dólares. Y lo hace. Un personaje que, como señala Vizcarra, se basa en la filosofía de hacerse el idiota. “Así quisimos pintar a Álex: pisado por su enamorada, el más chato, el más torpe. Y creo que al mostrar a un personaje vulnerable y defectuoso, pero al mismo tiempo con un lado cómico, creamos a alguien que todos quieren pero al que nadie presta mucha atención, lo que al final le permite salirse con la suya”, cuenta el cineasta.
Para Castañeda, que salió del mundo de la ‘impro’ y debuta en el cine, el mayor reto de interpretar a Álex fue que, como todo guachimán, tiene que pasar desapercibido. “Yo soy muy extrovertido y sociable, y el personaje es callado y observador. Por eso, muchas veces, cuando exageraba en el chiste, ahí estaba la mano de Gastón, que me pedía que bajara un poco el nivel de la interpretación”, explica.
Orúe también confió en Vizcarra para saber qué tanto tenía que dar su personaje: “Muchas veces yo le preguntaba si estaba seguro de que Laurita se viera tan irritada, y él me decía que era comedia, que el registro era más grande”, afirma la actriz, quien considera que su personaje tiene las cosas bien claras. “Ella tiene algo de materialista, es muy segura de lo que quiere. Ella la pasa bien con Álex, pero se da cuenta de que no es el chico para ella”, señala.
QUE COMIENCE LA JUERGA
Una vez ‘choteado’, Álex decide gastarse el dinero que ha robado de la que cree es la mejor manera: en mujeres. Y ahí entran a tallar, en distintos momentos, Shirley Arica y Anahí de Cárdenas, quienes interpretan a dos prostitutas. Para Arica, fue su primera vez actuando. “Fue un poco difícil porque es un rol desinhibido, pero Guillermo es mi amigo y todo se hizo más fácil”, cuenta la modelo, cuyos desnudos seguro causarán más de una taquicardia.
El personaje de De Cárdenas tendrá un maquiavélico plan para aprovecharse del buen Álex y de su dinero. La actriz contó que el tono cómico ayudó a sacar adelante las escenas de cama. “Me resultó mucho más fácil que si fuesen escenas físicas más en serio. Ya no era tanto el plan de ser sexual, sino de hacerlo puré al chico”, explica la intérprete.
“El guachimán”, sin vergüenza alguna, apela a la vena más popular: desnudos, lenguaje procaz, chistes sexuales y demás elementos se hacen presentes en la película. “Creo que el elemento que pongas, sean calatas, lisuras, balaceras o explosiones, tienen que estar supeditadas al guion”, explica Vizcarra. “He tratado que los momentos de desnudos en la cinta sean momentos graciosos. Si los pones gratuitamente, sin nada que los amarre al guion, puede ser un problema”, afirma el cineasta, quien, sin rubor, señala que la cinta tiene dos objetivos: “Que te rías y que te excites un poco”. Con chicas guapas y situaciones divertidas, difícil que “El guachimán” no lo consiga.
UN CINE POPULAR
Gastón Vizcarra la tiene clara: “Yo soy un convencido de que tiene que haber volumen de producción para que haya calidad de producción”. Y por eso “El guachimán” apunta a llevar la mayor cantidad de gente a los cines.
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Fuente: El Comercio
