Maquilla a fieles clientas en el segundo piso de la vivienda de su mamá y sigue vendiendo sus puñeras.
Desempolvó sus brochas, polvos y rímeles. Carlos Cacho se encuentra feliz de haber tomado la decisión de volver a ejercer su profesión de maquillador a pedido de sus clientas, por lo que ha empezado a atender algunas citas desde el hogar de su madre, donde cumple arresto domiciliario, en Chacra Ríos.
“Cuando estuvo en prisión sus clientas siempre estuvieron pendientes y atentas del momento en que saliera en libertad. Apenas dejó la prisión, lo llamaron para pedirle que las atendiera. Carlos lo estuvo pensando y, al ver que no está actuando en contra de la ley, y con la autorización de su mamá, amoldó el segundo piso de la casa para atender algunas citas. Maquillar es su pasión y ha regresado con fuerza”, expresó Juan Salas, asistente de Carlos Cacho.
Recordemos que Gisela Valcárcel le prometió en varias oportunidades, mediante su programa, que su lugar en “Amarige” estaba reservado para cuando deje la prisión. Ahora, ha podido regresar al arte que tanto ama.
Asimismo, contó que Carlos sigue elaborando nuevos diseños de puñeras y también de correas y carteras que ya se venden en todo el Perú.
“Aparte de los pedidos a domicilio, se abrió un stand en la Feria del Jockey Club y con la bendición de Dios están teniendo mucha acogida. Lo que se tiene planeado es exportar las puñeras y luego seguir con las carteras y correas al extranjero porque tenemos pedidos. La empresa, poco a poco, está dando sus frutos”, acotó.
¿Sabe Carlos que Erick Elera también sacó sus pulseras?
No lo sabe, pero las puñeras de Carlos son únicas y están registradas en Indecopi, así que no pueden copiarlas.
De otro lado, Cacho celebró la Navidad junto a su mamá y toda su familia, lo que en un momento parecía que iba ser en prisión. “Ha sido una Navidad totalmente diferente para él porque a las 12 pudo abrazar a su mamá y toda su familia y amigos que se dieron un tiempo en acompañarlo. Carlos ha cambiado, pues antes de hacer algo o tomar una decisión, lo piensa mucho y hasta lo consulta con su mamá. Esa forma impulsiva de actuar es parte del pasado”, dijo.
Fuente: Diario Trome