Herida en su orgullo de mujer, Lucía de la Cruz se rayó y le cantó sus cuatro verdades a Luisito Caycho. La criollaza, recontra molesta, le gritó en su cara que es un drogadicto, borracho y, de remate, gay.
“Tenía que sacarlo de las discotecas coqueado, borracho, escondiéndolo para que nadie lo vea. Una vez él jaló coca en mi casa, boté la botella de vodka que tenía a su lado y seguía jalando. Júrame por tu madre que no es verdad lo que digo”, dijo la criolla al programa ’La noche es mía’.
También, contó que una vez su esposo le pidió que lo saque del clóset. “Ese tipo al que ustedes ven es un indefinido porque me dijo ’ay cuculí por qué no me sacas del clóset’. Yo soy peruana y no permito que ningún imbécil como este le pegue a otra mujer”, dijo desafiante la artista al mismísimo Luisito.
No lo amó. Lucía reafirmó que jamás estuvo enamorada de Luisito al ser consultada por Carlos Carlín. “Nunca lo amé, mi amor fue falso. ¿Cómo pueden darle cabida a mi todavía esposo después de que embarazó a una adúltera?, eso me mató”, añadió.
Lo niega. Luisito no se quedó atrás y amenazó con denunciarla por difamación. “Todo lo que dice es totalmente falso, que siga hablando porque la voy a denunciar. Ella tendrá que comprobar lo que dice porque jamás me he drogado y tampoco soy gay”, sostuvo y, a modo de broma, juró que le pondrá Lucía a su futura hija, fruto de su relación con Pamela Calle.
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Fuente: Diario Aja
