En la vida real nunca se casó ni soñó con ser mamá y, en la ficción, prefiere que los hombres sean “pisados”. De armas tomar y con voz de mando, Irma Maury, la popular “Nelly Gonzales” de la serie Al fondo hay sitio, nos cuenta por qué el matrimonio jamás le robó el sueño y por qué cuando está en el pellejo de la gritona “Nelly” prefiere que su esposo sea un tipo obediente.
-Nelly, ¿a usted le gustan los pisados?
Supongo que sí. Para Nelly debe ser satisfactorio tener un marido así. Soy una mujer autoritaria y castrante porque quiero manejar la vida de todo el mundo y siempre tengo la razón.
-¿Siempre tendrá pisado a Gilberto?
Pero en el fondo lo amo, lo que pasa es que Nelly es como la viuda negra que mata lo que ama.
-Nelly, ¿los hombres peruanos deben ser pisados?
Deben de serlo (ríe) y veo ahora que las mujeres son las más mandonas en la casa. Pero no me meto con los cumbiamberos (que sacan la vuelta), solo me meto con lo que daña a mi casa.
Pero mientras “Nelly” encabeza un matriarcado, Irma Maury se comprometió con la eterna soltería.
“Decidí no ser mamá por propia voluntad y fue mi opción quedarme soltera. No fue por una decepción amorosa y no me incomoda que me digan solterona porque nunca busqué casarme”, confesó la actriz.
