No le molesta hablar de Carmona y Tula, pero “eso es el ayer y yo ni pienso en lo que comí ayer”.
Gisela Valcárcel conversó de tú a tú con Trome y contó que -en este momento de su vida- se siente una mujer realizada como madre, abuela y empresaria. Que el amor llegará en su momento, pero no está desesperada por encontrarlo. Precisó que Roberto Martínez es su amigo y Javier Carmona, hoy pareja de Tula Rodríguez, es parte de su pasado.
Hace unos días Magaly dijo que deseaba que tú encuentres un hombre que te ame.
¡Ay!, la comadre. Gracias por sus buenos deseos. Seguro más adelante lo encontraré, todo tiene su tiempo.
¿No estás buscándolo?
La verdad, no. Es que tengo tanto trabajo y estoy tan distraída en otras cosas. Doménica y Luana (sus nietas) toman mucho tiempo de mí, el tiempo que tengo para el amor lo toman ellas.
Pero una como mujer necesita el “apapacho” de una pareja.
Creo que sí, pero estoy realmente completa. Esos cariñitos que a veces uno puede necesitar, han sido absolutamente bien tomados.
Sin embargo, juegas con eso en el programa y dices que “hace tiempo que no la ves”.
(risas) Yo juego con lo que la gente sabe y me divierto con mis situaciones. Hace tiempo que no tengo pareja y con eso bromeo
Será por eso que cuando te ven con Roberto hacen toda una novela de amor…
Con él y con cualquiera que me vean. Pienso que cuando hay una ilusión sana en la gente, de alguien a quien consideran su amiga, quieren que tenga una pareja.
¿No te molesta que te relacionen con Roberto?
Para nada. Es una persona que valoro, aprecio y quiero mucho.
Cambiando de tema, siento que te molesta que te pregunten por Javier Carmona y Tula…
No es que me moleste, sino que siento que hablar siempre del ayer es algo que muchos tienen como parte de su diálogo. Quiero hablar de mi presente y del futuro. Lo demás ya se escribió, no puedo estar releyendo mi ayer. Mi ayer solo debe existir para recordar lo bonito nada más.
¿Esa página ya está volteada?
Y para ellos y para todos. Entonces es ocioso venir con ese tema y yo ya no pienso ni en lo que comí ayer.
¿Tienes lindos recuerdos de las personas que han formado parte de tu vida?
Todo lo que viví ha construido la persona que soy, entonces mi balance tiene que ser positivo. Por tanto, aquí estoy mirando hacia adelante.
Estás a la cabeza de “GV Producciones” y el éxito de “El último pasajero” ha sido arrollador.
Estamos felices y agradecidos por el gran boom que ha sido “El último pasajero”. Feliz además por el equipo que lo hace, por Adolfo Aguilar que considero es un extraordinario animador y una excelente persona.
A veces el freno de peluquería es de infarto.
A mí también me parece, lo siento como fuerte. Pero cuando uno está liderando, lo da todo por su equipo. Me encanta ver a las chicas que con solo 15 años ya son líderes y yo también por mi equipo me cortaría el cabello
¿El programa no ha generado un conflicto al competir con un espacio de tu canal (Habacilar), además, de tus roces públicos con Raúl Romero?
Personalmente, no he tenido ningún conflicto. Si los hay, los desconozco. Voy todas las semanas al canal y nunca me han llamado la atención, saben que es una sana competencia.
¿En esta etapa de tu vida puedes decir que aprendiste de tus errores?
Todos los días nos equivocamos, somos humanos, pero sí aprendemos a disculpar, a pedir disculpas y aprendemos a aceptarnos.
¿Y has pedido disculpas y has disculpado?
Ambas cosas las hago diariamente… La vida es un búmeran, todo lo que das, es lo que vas a recibir.
¿Este acercamiento a Dios te cambió la vida?
Él es todo para mí, sin él no quiero nada. El Señor me sacó de momentos tristes, me dio su mano cuando yo la necesitaba. Dios es todo para mí, entendí que Dios es lo primero y lo último.
¿Cómo hace Gisela para mantenerse tan bella?
Gracias, pero no siempre veo eso frente a mi espejo (risas) ¿Qué hago? Primero pienso bien, aunque mis pensamientos no son siempre simpáticos. A veces amanezco media cruzada como mujer, porque las mujeres somos hormonales, qué sé yo… pero me cuido, siempre salgo a caminar, hago pilates y como bien. También hago todos mis toques y tratamientos, me embadurno en cremas.
¿Alguna cirugía?
Quizá ya se está acercando el momento (risas)
¿Qué es lo que te falta para sentirte realizada?
Es que hoy ya estoy realizada, pero seguramente si me pongo a pensar, tengo grandes sueños. Hay tantas cosas y mientras viva habrá sueños, pero solo le agradezco a Dios por el día de hoy y por todo lo que tengo… lo demás va a llegar.
Fuente: Diario Trome