“Que se rape, que le quedará bien”, dijo la novia del jugador, quien aseguró que recibió el beso de un “santo”.
Antes de irse al Mundial de Sudáfrica, Iker Casillas apostó que si España alzaba la Copa del Mundo se rapaba el cabello o se casaba. La Furia Roja salió campeón y es hora de cumplir promesas.
Y, después de ver el efusivo beso de Casillas a Sara Carbonero, la mayoría pensará que el capitán de la selección española optará por contraer matrimonio, pero la novia del jugador prefiere que el arquero del Real Madrid se rape el cabello. “¿Se volvió loca?”, dirán todas las mujeres que suspiraron con el romántico momento y que en su lugar hubieran respondido “boda”, pero ella dio la contra.
“No, no… Que se rape, que le quedará bien, seguro”, fue la respuesta que dio la periodista al canal Tele 5, cadena para la que trabaja, ante la pregunta de sus colegas.
Sobre el mágico momento que vivió y que la dejó sorprendida comentó: “Fue llegar a mi primer Mundial de fútbol y besar el santo”. Ella no se considera el talismán de la selección por estar siempre cerca del portero español.
“Podemos decir que tenemos la mejor selección del mundo, podemos decir que nunca había que dudar de esta selección, podemos decir que lo de Suiza fue un accidente, nadie nos puede cuestionar, ni talismán ni nada”, aseguró. ¿Qué dirá Iker?