El tenor peruano Juan Diego Flórez, considerado la nueva estrella mundial de la ópera, afirmó en México que para ser uno de los grandes de la ópera no sólo es necesario tener una gran voz sino además ser “muy paciente”.
“Para poder seguir los pasos de los grandes como Pavarotti o Plácido Domingo es indispensable tener una preparación exhaustiva y ser muy, muy pacientes para estar realmente listos y lograr mantenerse en la cima”, dijo hoy Flórez en una teleconferencia con los medios mexicanos.
El artista peruano, nombrado por el mismo Luciano Pavarotti (1935-2007) como su “sucesor”, recordó que las nuevas generaciones de cantantes de ópera tienden a apresurarse a llegar al éxito y, por cantar demasiado pronto en el ámbito profesional “sin estar aún maduros, aparecen y desaparecen” muy pronto de los escenarios.
Con motivo de varias celebraciones bicentenarias de Independencia en Latinoamérica, el tenor visitará por segunda ocasión a Ciudad de México el próximo 10 de octubre acompañado de la Orquesta Sinfónica de Yucatán, que dirigirá el maestro mexicano Juan Carlos Lomónaco.
El Auditorio Nacional será el escenario de la velada en la que Flórez interpretará arias de ópera de la autoría de Rossini y Donizetti, compositores recurrentes en la carrera del tenor, y música latinoamericana.
Entre las primeras destacan “Sinfonia Cenerentola”, “Una furtiva lágrima”, “A mes amis”, “Si ritrovarla io giuro” y “Sinfonia fille du regiment” serán algunas de las piezas operísticas del programa.
Además habrá temas latinoamericanos como “Aquellos ojos verdes”, “El día que me quieras”, “Júrame” y “En mi viejo San Juan” en el repertorio del artista latinoamericano.
“Estoy ansioso por volver a México, es como estar en mi propio país ya que Latinoamérica es en sí un gran país”, aseguró Flórez.
Juan Diego Flórez nació en Lima en 1973 e inició sus actuaciones explorando géneros musicales como el pop, la balada, el rock y la trova.
Posteriormente ingresó al Conservatorio Nacional de Música en Lima y al Curtis Instituye of Music de Philadelphia, desde donde hizo su incursión en el ámbito operístico.
A la fecha es considerada una de las voces más privilegiadas del “Bel canto” mundial, un reconocimiento que le valió en 2004 el premio Clásico de Cannes, el premio Abbiati como mejor cantante en 2000, la Orden del Sol de Perú, y una nominación al Grammy en el 2009, entre otros reconocimientos.
El próximo 7 de octubre, cantará en la ciudad de Los Ángeles (EE.UU.) con la Filarmónica de Los Ángeles y el 14 de octubre se presentará por primera vez en Chile, en el Teatro Municipal de Santiago.
El resto del año continuará sus presentaciones en Viena (Austria) y Zurich (Suiza) con “Elixir de amor” y posteriormente realizará una gira por Europa que finalizará con un concierto de Navidad de nuevo en la capital austríaca.